Norma que debiera ser de obligado cumplimiento

Norma que debiera ser de obligado cumplimiento para todos
Para facilitar la organización de vehículos y saber a quienes hay que esperar en Mompía o en cualquier otro lugar de reunión de salida, se ruega muy encarecidamente enviar un mensaje bien al móvil, o bien al correo electrónico de Alberto o quien dirija la salida, indicando quiénes van a ir a la marcha, lo más tarde el viernes al mediodía, si es posible.

miércoles, 24 de agosto de 2011

Pico del Acero, Las Agudinas, El Rendijón, Canto la Concha, La Hendida: bellos rincones en el Oriental

El sábado nos presentamos en el pueblo de Colio Cristina, Julian, un tal Justo, y yo mismo. De las tres propuestas que les había planteado a mis acompañantes de hoy, nos decantamos por esta: salir del pueblo de Colio, subir por la canal de Paña, pasar por la cumbre del Pico del Acero, admirar el glaciar de roca conocido como el Canchorral de Hormas, recorrer la crestería de las Agudinas, salvar la pared vertical conocida como la Paré Corvera por el paso denominado La Héndida, y ya desde aquí con un corta subida llegar a la cumbre llamada Canto la Concha de 2.090 mts.. Esta cumbre está situada muy cerca del Samelar, al oeste de este, y que suele pasar desapercibida, por lo que decidimos acceder a ella en lugar del Samelar, que aunque cercano, cuesta un poco más llegar a su cumbre y así nos anotábamos un nuevo 2000 a nuestra agenda
Esta primera parte de la ascensión la recorrimos hace poco más de un mes, y ya puse también el relato en este blog, pero aquel día la niebla nos impidió pasar del collado de la Llaguna y nuestra ascensión quedó incompleta

Esta vez, aunque el tiempo estaba bastante tormentoso e incluso nos cayeron algunas gotas en distintos momentos del día con algún trueno que otro, las nubes eran altas y nos dejaron realizar el recorrido con muy buena visibilidad

Una vista muy aérea del pueblo de Colio desde la cumbre del Pico del Acero

Foto de cumbre en el Pico del Acero de 1.676 mts.
Después de descender del Pico del Acero, bordeamos el Canchorral de Hormas, auténtico glaciar de piedras, que siempre llama la atención cuando se transita por sus cercanías.
Nos acercamos a la larga y bonita crestería de las Agudinas y nos disponemos a recorrerla con las reticencias de Cristina, que debido al fuerte viento que sopla, la da un poco de inseguridad

Terminamos la crestería y pasamos el collado de la Llaguna para acercarnos a las imponentes paredes de la Paré Corvera. Mi idea era subir por la Hendida, pero Julian insiste en que nos acerquemos hasta el Rendijón, que así se llama el otro paso existente para superar la Paré, para que lo conozcamos, pero que a mi me da un poco de "reparo", pues he leído que es de superior dificultad que la Hendida, y me preocupa sobre todo por Cristina, que no está acostumbrada a pasos complicados o expuestos
Nos dejamos convencer y enseguida damos vista al paso, que es el corte que se ve en el centro de la foto. Así en la corta distancia "acogona", pero quiero creer, y hacer creer a los demás, que como ocurre muchas veces, un paso que parece imposible, al acercarse a el se pude dejar superar relativamente fácil.
La entrada a el Rendijón -¡yo por aquí no subo! dice alguno
Salvamos un primer paso no muy difícil pero con un poco de patio y a continuación nos encontramos con un agujero-embudo vertical que hay que superar sin mochila, pero con buenos agarres para pies y manos. Después de superar este paso aún quedan dos resaltes que nos cuesta algún empujoncito que otro para poder superarles, además hay mucha piedra suelta y alguno se lleva algún buen coscorrón

Pero al fin, llegamos a la parte más fácil y sentimos gran alivio por haber superado estos "peligrosos" pasos. Aunque aún nos aguarda una sorpresa. El suelo y las paredes laterales están plagadas de abejas, si, si, de abejas. El fuerte viento que sopla y que se encajona en la canal, arrastra a las ligeras abejas y se quedan aquí depositadas sin fuerzas para elevar el vuelo, así que tenemos que tener mucho cuidado para no pisarlas y sobre todo para que no nos piquen en las manos al apoyarnos en la pared. Superado este último "obstáculo" solo nos queda salvar los últimos 150 metros para llegar a la cumbre del Canto la Concha
Ya desde la cumbre vemos a la derecha la salida del Rendijón y a la izquierda la Héndida, que será por donde bajemos

Foto de cumbre, primera para los cuatro
Y después de comer y de intentar dar una cabezadita, tenemos que iniciar rápido el descenso, pues una nube tormentosa se nos ha puesto encima descargando algo de lluvia y algún trueno que otro. La cumbre del fondo es el Canto la Concha
Descendiendo la Héndida, que es mucho más asequible que el Rendijón

La crestería de las Agudinas que hemos recorrido en la subida. Ahora la bordeamos por la izquierda
El Pico del Acero. Este también le bordeamos por su cara norte
El Canchorral con la luz del atardecer
El Pico Paña y la Ventosa
A la izquierda el pueblo de Cabañes y en primer término el barrio de Penduso. Al fondo se ve Lebeña. Y tras 11 horas de actividad (el Rendijón nos llevó más de media hora) llegamos a Colio, justo a tiempo para librarnos de la fuerte tormenta que descargó al poco de salir del pueblo para el regreso. Recorrimos lugares hermosos, superamos obstáculos "insalvables", hicimos una cumbre desconocida, disfrutamos de buena compañía (bueno, uno de ellos dio un poco la trisca ¿no adivináis quién pudo ser?) ¿que más se puede pedir? ¡y el sábado al Pico Cortes! Hasta entonces ¡SALUDOTES PARA TODOS!